Hoy hemos salido de la isla de San Vicente con el propósito de conocer su isla vecina la isla de San Antón es la isla que queda en la parte más occidental del archipiélago y por lo que nos han dicho es muy interesante de conocer por su vegetación y sus cultivos. Parece ser que es una isla que se está preparando para el turismo de senderismo pues tiene unas vistas espectaculares desde sus picos el más alto de dos mil metros aproximadamente.

El ferri es el que todo el mundo utiliza aunque hay otra compañía que hace esta singladura con otro horario, es un trayecto de una hora, la verdad es que cuando subes y empiezas a mirar el ferri te dan ganas de bajarte de nuevo por lo ajado que lo tienen y su falta de pintura pero vamos a querer pensar en positivo y seguir la aventura.

Lee más sobre hacer senderismo en Santo Antao

Matemático como un reloj suizo ha salido y ha llegado a su hora a Porto Novo una población muy activa por su transporte diario de mercancías principalmente verduras y frutas.

Hemos negociado un precio con un taxista para que nos lleve al norte de la isla y nos haga un recorrido por toda esta parte pues la información que tenemos es que es la más interesante de ver.

Los barrancos y precipicios son espectaculares y aunque no hemos pasado miedo tampoco las teníamos todas, pues conducen muy rápido y las protecciones en la carretera no se puede decir que te den ninguna garantía porque o no hay, o están hechas polvo, si a esto le sumamos que en su noventa por ciento las carreteras son empedradas, los baches y traqueteos aumentan un poco la inseguridad.

Una población del norte que tiene interés por su atractivo es Paul, tiene este nombre por el santo (San Vicente Paul), esta población está rodeada por su agricultura y  a la que te sales un poco del centro los campos y la vegetación lo invaden todo, francamente es bonito de ver.

En Sinagoga otro pueblo de costa a finales del siglo XIX había un hospital de leprosos hoy solo quedan las ruinas de lo que fue y si no es por nuestro taxista que nos lo ha comentado ni nos hubiésemos enterado de ello.

Seguimos costeando por una carretera asfaltada y después de cuatro horas regresamos a Porto Novo y nos estamos planteando pasar aquí la noche para poder conocer la parte sur de la isla pues el taxista, nos han dicho que aunque completamente diferente al norte también esta parte es bonita de ver, en particular Tarrafal un antiguo pueblo de pescadores que tuvo su importancia por la pesca, pero que hoy solo es un recuerdo.

De nuevo en el ferri pues en San Vicente hacen una fiesta de  carnaval en pleno mes de agosto con la idea de captar más turismo, esto sí que es tener moral, en todos los casos no queremos perdernos el evento.